Acciones Energéticas

Después de los últimos cambios del gobierno con la intención de eliminar el déficit de tarifa que ya está cerca de los 30.000 millones, las acciones de las empresas energéticas se han visto afectadas. Claramente los peores parados son las empresas de energías renovables, las inversiones se realizaron en un momento en el que se esperaban unas rentabilidades que ahora no se van a poder percibir, con lo que sus dividendos corren grave peligro. Una «estafa», una «vergüenza», un «desastre». Las patronales de las energías renovables, que reúnen, según sus datos, a un 70% del sector, no se han quedado cortas en adjetivos para oponerse a la quinta reforma del sector energético en un año, aprobada por el Gobierno el pasado viernes. Una vez más, por decreto ley, y una vez más, afirman, con el propósito de acabar con las energías renovables.

Empresas como Abengoa  tiene previsto pagar 7 céntimos por acción en julio pero con las nuevas modificaciones esto se podría ver alterado. Acciona desde la presentación de las medidas ha caído un 20% y se cree que estas medida pueden reducir un 50% sus beneficios después de impuestos. Esto se debe a que su mayor parte de su negocio se concentra en España y se encuentran con el problema de no poder vender sus activos debido a la pérdida de atractivo debido a los últimos reales decretos.

Por su parte Gamesa no se ve tan afectada ya que al ser principalmente constructora de aerogeneradores además de tener la mayor parte de su mercado en el extranjero.

Por otro lado están las compañías eléctricas tradicionales, estas medidas no afectan tanto  a Endesa e Iberdrola. Los analistas dicen que los beneficios de Iberdrola solo se ven afectados en un 2% que es un impacto marginal. Dentro del mercado puede ser una buena opción pero con volatilidad en el corte plazo. También Endesa por su exposición en países latinoamericas en crecimiento puede ser otra buena opción, pero existe el riesgo de expropiación, ambas son más sensibles a otros impuestos como los de hidráulicos o nucleares. El año pasado se produjo una nueva tasa de ahí que ambas estén planteándose el cierre Garoña. Las nuevas cargas fiscales amenazaban la rentabilidad, la nueva fiscalidad supondría pagar un tributo de 153 millones de euros  lo que podría dejar un patrimonio neto negativo al grupo de estos dos gigantes y la central quedaría abocada al cierre.

Gas natural y Enagás por su parte se han visto beneficiadas por las medidas e incluso se han registrado ascensos en el mercado, las medidas afectan demasiado a las renovables y parece eso podría beneficiar directamente a las empresas que traten con el gas ya que las centrales de ciclo combinado pueden aumentar sus horas de funcionamiento.

Otras de las beneficiadas son Red Eléctrica y Enagás, estos grupos que se dedican al transporte de energía los recortes no le han afectado en absoluto y nadie duda de sus dividendos.

Empresas beneficiadas
Valor Precio Ren/Div Comprar Mantener Vender
Enagás
17,655
5,83 20 5 3
Gas natural
15,375
5,53 14 12 4
Red Eléctrica
41,37
5,34 13 10 7
Endesa
17,095
3,51 13 11 1
Iberdrola
3,689
8,95 15 15 15
Empresas   perjudicadas
Acciona
46,96
6,11 6 8 10
Abengoa
1,89
7 3 7
Gamesa 2,25 0,41 2 4 17
Elecnor 11,1 2,89 1 1 1

Fuente: Revista Inversión www.finanzas.com

El Decretazo

En medio de los escándalos de corrupción entre ellas la última de nuestro ex presidente del gobierno Felipe González (comento está entre otras por su relación con la energía) llego lo que cualquier propietario de una planta de energía renovable temía.

El pasado viernes el gobierno saco un nuevo Real Decreto en el que las centrales de generación de energías en régimen especial (biomasa, solar, eólica, hidráulica y cogeneración) tendrán dos opciones; la primera de ellas es pasarse a régimen de tarifa y la segunda es seguir en el mercado pero sin ningún tipo de primas, el real decreto es de carácter retroactivo desde el 1 de Enero.

Básicamente solo les deja una opción, el régimen de tarifa. La opción de seguir en el mercado, siendo las centrales con los costes más altos y sin el soporte de las primas se presenta misión imposible para la mayoría de ellas, siendo lo más probable la bancarrota, cierre y poca posibilidad de recuperar la inversión.

Para entender esto hay que situarse. Las primas es algo que es necesario hacer cuando se quiere impulsar una nueva tecnología, nadie se mueve a hacer algo si no le sale rentable económicamente esto es así, nos movemos por el dinero. Claro que la gestión de estas primas ha sido pésima, en menos de 4 años España se ha convertido en el país con más energía eólica del mundo y ha multiplicado por 10 los Kw producidos de biomasa, por 20 los de solar fotovoltaica y por 300 los de solar térmica. Además de multiplicar por 2 la capacidad de producción de los ciclos combinados.

Esto ha hecho que de un pico de demanda máximo de unos 44.000 Mw nosotros tengamos una capacidad de 100.000 Mw, es necesario un sobredimensionamiento, se dice que lo óptimo es un 10% más, pero más del doble es algo desorbitado, por eso somos el país con la energía más cara de toda Europa. No solo tenemos la más cara sino que el déficit de tarifa sigue creciendo es algo bastante desquiciante por que encima da la sensación de que debería ser mas cara.La culpa de esto no solo la tienen las renovables, todos tienen su parte de culpa.

Una vez llegados a este punto, el tema se hace complejo. Desde todos los puntos de vista se pueden sacar datos para sostener una postura. Bajo mi punto de vista, cualquiera que lea un poco el blog se dará cuenta que soy activista de las energías renovables pero como expuse en el post sostenibilidad energética, algo es sostenible cuando es económica, social y medioambientalmente viables. El continuar con las primas se hacía insostenible, no se puede seguir pagando una medida propulsora de una tecnología cuando somos los más avanzados en ella, esto había que estabilizarlo de alguna forma. ¿Esta era la forma? Es difícil saberlo.

Esta medida es completamente injusta para aquellas centrales que hayan hecho su plan de negocio con un régimen regulativo y de repente les cambie el marco. Pero las centrales que en menos de 2 años recuperaron la inversión y llevan otros dos cobrando unas primas desorbitadas tampoco me parece justo que sigan haciéndose de oro de esa manera.

En régimen de tarifa se cubrirán costes, el margen de beneficio será pequeño, se podrá recuperar la inversión a más largo plazo y serán centrales rentables. Ahora tienen que luchar por mejorar la tecnología, disminuir costes y pelear cada céntimo.

Han dejado de ser el negocio del siglo pero seguirán siendo negocio. Este decreto, bajo mi punto de vista y es completamente discutible ya que también trae consigo muchos efectos negativos (cierre de centrales, pérdidas de puestos de trabajo, inaviabilidad de multitud de proyectos etc.) ha evitado que las energías renovables se convirtieran en la segunda burbuja sino lo son ya.